El individuo fue detenido en Cuenca tras la alerta de otras fuerzas de seguridad y ahora se enfrenta a una denuncia por drogas y diligencias penales por su negativa a someterse al test de alcohol.
En la tarde de este viernes, la rápida intervención de la Policía Local de Cuenca ha sacado de la circulación a un conductor que representaba un grave peligro para la seguridad vial. El individuo, que fue interceptado tras observarse su conducción irregular, dio positivo en el test de detección de drogas y se negó repetidamente a completar la prueba de alcoholemia.
Los hechos se desencadenaron cuando otras fuerzas y cuerpos de seguridad que patrullaban la zona alertaron sobre el comportamiento errático del conductor de un turismo. Una vez personados los agentes de tráfico en el lugar, procedieron a identificar al responsable y a realizarle las pruebas pertinentes.
Según fuentes oficiales, el conductor interrumpió en varias ocasiones la prueba de alcoholemia, simulando soplar sin llegar a completarla correctamente. Esta maniobra se considera legalmente una negativa a realizar la prueba, lo que constituye un presunto delito contra la seguridad vial.
Posteriormente, fue sometido al test de detección de drogas, en el que arrojó un resultado positivo, confirmando la presencia de sustancias estupefacientes en su organismo. Por este motivo, fue denunciado administrativamente.
Como resultado de la intervención, se han instruido diligencias judiciales por la negativa a someterse a la prueba de alcoholemia, mientras que la infracción por drogas seguirá su curso administrativo.
Las autoridades recuerdan una vez más el grave riesgo que supone ponerse al volante bajo los efectos del alcohol o las drogas, una conducta que no solo pone en peligro la vida del propio conductor, sino también la de todos los demás usuarios de la vía.