Halloweek en Halloween
Estos días, anteriores a la festividad de Todos los Santos, nuestras calles se llenan de disfraces que, a diferencia de los del carnaval, suelen coincidir con personajes relacionados con seres de ultratumba o sacados de películas de terror o de los libros de Stephen King. Una costumbre que, aunque bastante lejana en la historia de España, se fue imponiendo progresivamente gracias a las películas procedentes de los Estados Unidos en las que, eso de Halloween, que significa Víspera de todos los Santos, molaba y mucho.
El origen de todo esto, dicen, se remonta a la cultura celta y, de ahí, a Irlanda que festejaban de alguna manera la llegada del nuevo año al coincidir con la caída de las hojas de los árboles en clara referencia a la muerte y el comienzo de una nueva vida. Curiosamente, la Víspera de todos los Santos coincide con el 31 de octubre gracias a que, Gregorio IV, trasladó la fiesta de Todos los Santos del 13 de mayo al 31 de octubre, en los primeros años del siglo 9, por razones prácticas, al parecer, porque Roma no podía acomodar a tantos peregrinos como acudían y por consideraciones de salubridades.
¿Cómo se celebraba? Pues prendiendo hogueras, utilizando máscaras y disfraces para ahuyentar a los malos espíritus, colocando calaveras, objetos que tuvieran relación con la muerte etc. Como ahora mismo.
Halloweek
Decimos que nuestras calles se llenan de disfraces cuando, realmente, son nuestros niños los que, llegados estas fechas, dan la nota de color con algo de tenebrismo .
Es lo que ha pasado en el colegio público Santa Teresa, de Cuenca, en donde ayer viernes finalizaba lo que han titulado “Halloweek”: una serie de actividades relacionadas con Halloween a lo largo de una semana, week, en la que han participado 240 alumnos coordinados con el cuadro de profesores. “Más que actividades extraescolares, que también las ha habido, hemos llevado a cabo, cómo no, otras extracurriculares y complementarias a las que les hemos añadido un guiño, una señal diferente orientadas a la inclusión. Hemos querido darle una vuelta de tuerca a esta celebración, tan popular en todos los centros, integrando nuestro proyecto escolar saludable y sobre todo el plan de igualdad y nuestro programa bilingüe Todos contra el bullying o acoso escolar” dice Tania Martínez, coordinadora de Bilingüismo, maestra de inglés y promotora de esta idea que se iniciaba el pasado lunes.
“Sí, comenzamos el lunes con el misterio del conde Alexander. Un juego break out, estilo Cluedo, cuyo misterio se supo ayer viernes en el que han trabajado la mayoría de los alumnos. Una investigación que, además, ha sido transmitida, dada a conocer a través de las redes del centro dejando bien claro que las apariencias engañan. Se ha hecho en lengua inglesa, en inglés, al ser un centro bilingüe. Pero lo más reseñable, quizás, haya sido el hilo conductor que hemos elegido. Una película, Spookley, la calabaza cuadrada que hemos proyectado en la clase y que trata sobre el bullying. Una historia que narra el paso de una tormenta sobre un huerto de calabazas en el que, un ejemplar, marginado por su forma, debe de usar la inteligencia para salvar la cosecha demostrando, así, su valía” añade Tania quien, por cierto, nos ha dejado los vídeos relacionados con ese “Halloweek”. “Una película que hemos visionado en inglés, claro, película con mensaje porque en un mundo circular, algo cuadrado no encaja o no es fácil que pueda desarrollar las mismas cualidades, que sea integrado en algo tan básico como en un huerto de calabazas. Sin embargo, nuestras diferencias nos potencian y, esa, es la enseñanza que hemos querido queremos inculcar esos días”.
A lo largo de la semana se ha ido visionando la película de animación, “Spookley”, y se han llenado de pruebas y juegos las superficies del patio de recreo hasta llegar al viernes en el que se desarrolló una programación especial donde, no solo los disfraces protagonizaron la jornada. “No, hubo muchos cosas dentro de un programa en el que toda la comunidad educativa se involucró porque, gracias a todos, a las familias y a los profesores, lo hemos podido hacer con el almuerzo terrorífico y una ruta de truco o trato para 240 alumnos basándonos en otra de las leyendas que envuelven la celebración de Halloween como es la calabaza y el espíritu de Jack O´Lantern”, añade Tania porque la noche del 31 de octubre, cuando los espíritus vagaban entre los vivos, había uno especialmente aterrador, el de Jack O’Lantern, que iba de aldea en aldea visitando todas las casas tras hacer un pacto con el diablo. El difunto se presentaba en los hogares pidiendo “truco o trato” y todo aquel que se negara a pactar con él sería maldecido. Para protegerse, cuentan, comenzaron a transformar las calabazas –iluminadas en su interior- en objetos de terror que ahuyentaran al espíritu de O’Lantern.
“Ver a 240 niños, pidiendo, además de bucólico, es una experiencia enriquecedora para todos ellos. Eso, la gymkhana inclusiva llamada hocus pocus i need some time fo focus (abracadabra, para poderme concentrar necesito jugar) decoración de todo el edificio, la cueva tenebrosa, las escaleras…todo maridado con un dance challenge al estilo tik tok y, por la tarde, más actividades en las que el AMPA se encargó de unir lazos, de atar la comunidad y de potenciar el trabajo en equipo bajo un velo de la cultura inglesa que exalta una de las clebraciones más populares del mundo”.
Vídeo realizado por el personal docente y alumnado a reproducir en pantalla pequeña