Este martes 31 de enero un tren ha vuelto a parar en la estación de Cuenca siete meses después de que el Gobierno central, de acuerdo con la Junta de Comunidades, Diputación y Ayuntamiento de Cuenca, decidieran poner punto y final a la línea de ferrocarril tradicional que unía Cuenca con Madrid y Valencia.
El motivo de la llegada de este tren no es otro, tal y como ha podido saber este diario, de las pertinentes prácticas de los maquinistas. Si el pasado lunes el trayecto fue Madrid-Tarancón, este martes ha sido Madrid-Cuenca.
Hay que recordar que el último tren convencional que llegó a la estación de Cuenca fue el martes 19 de julio. Desde entonces, numerosos colectivos y la práctica totalidad de los partidos políticos de Cuenca a excepción del PSOE han emprendido una lucha que acabará en los tribunales para recuperar este servicio.
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