La Justicia ha dado una vez más la razón a un afectado por una tarjeta revolving. Concretamente, el Juzgado de 1º Instancia Nº 102 de Madrid ha declarado nula la tarjeta revolving Nueva Visa que la conquense Olga Martínez Coronado mantenía con Wizink desde 2013.
Una sentencia que, tras la acción de Reclama Por Mí, ha logrado acabar con la espiral de endeudamiento en la que se vio sumida la afectada y que condena a Wizink a devolverle “todas las cantidades abonadas que excedan del capital dispuesto inicialmente”. Concretamente, un total de 17.080 euros, de los que 12.879 euros se eliminan en concepto de deuda.
“Me la ofreció un comercial en mi puesto de trabajo. La verdad es que no me explicaron nada respecto a los intereses que se aplicarían y bueno, lo vi una opción cómoda de financiar mis compras”, explica Olga Martínez.
Dicha comodidad desapareció enseguida cuando la afectada vio que, pese a no utilizar la tarjeta, las cuotas eran muy elevadas, por los intereses aplicados.
De hecho, la propia sentencia recoge que Wizink aplicaba en dicha tarjeta revolving un TAE inicial del 26,82% que, más tarde, elevó al 27,24%.
“Es que incluso teniendo un trabajo, con un sueldo digno, me vi envuelta en una rueda. Las cuotas eran cada vez más altas y distintas cada mes, incluso sin utilizar la tarjeta durante tres años. Era una situación que me generaba una gran ansiedad”, explica esta vecina de Cuenca.
Así, decidió poner fin a la situación y presentar una reclamación contra Wizink a través de Reclama Por Mí.
Una decisión que hoy celebra ya que, como ella misma asegura, es una trampa de la que es muy difícil salir.
“Los afectados por las tarjetas revolving se ven incapaces de salir de la rueda de endeudamiento, lo que les lleva a situaciones muy angustiosas. El caso de Olga es el de muchas otras personas a las que les ocultaron realmente cómo funcionan las tarjetas revolving, escondiéndoles todo lo relativo a los abusivos intereses que las acompañan ”, explica Fernando Renedo, socio fundador de Reclama Por Mí.
Unos intereses que, como recuerdan desde www.reclamapormi.com, abogados expertos en tarjetas revolving, son un ejemplo de usura, reconocido por la Justicia.
“Nuestro objetivo es que cualquier persona que este atrapada por una tarjeta revolving o cualquier otro tipo de producto financiero similar sepa que puede reclamar, incluso tras haber finalizado su contrato”.
Tras presentar una reclamación, el afectado puede llegar a cancelar el contrato, anular la deuda y recuperar el dinero pagado de más en concepto de intereses “Cada vez son más los que deciden denunciar a entidades como Wizink, Bankinter, Sabadell, Caixabank, BBVA o Santander y contactar con abogados especialistas consiguiendo acabar con esa rueda de ratón”, afirma el socio fundador de Reclama Por Mí.