Esta tarde se ha presentado en el Centro de Arte Contemporáneo de la Fundación Antonio Pérez en la capital conquense, dependiente de la Diputación de Cuenca, la donación por parte del coleccionista Roberto Polo de la escultura Pararrayos de Nino Longobardi. Esta obra fue fundida en el año 2000 y está hecha de bronce y aluminio patinado color plomo, ha estado en exposiciones por todo el mundo y la más importante fue en el pabellón de Italia en la Bienal de Venecia en el año 2011.
La vicepresidenta de la fundación y diputada de Cultura, María Ángeles Martínez, el coleccionista Roberto Polo y el director de la FAP, Jesús Carrascosa, han sido los encargados de presentar a los medios de comunicación esta escultura que se encuentra en la sala 4 junto cuadros del artista Luis Feito.
La responsable de la Diputación de Cuenca ha agradecido al coleccionista cubano esta donación porque es una contribución muy grande y que encaja perfectamente en la FAP en un momento muy importante porque se está celebrando el 25 aniversario que está permitiendo dar más repercusión al museo.
Polo, por su parte, ha confesado que ayer le envió una foto al artista Nino Longobardi y que estaba encantado por la ubicación que se había elegido para su obra; ha destacado que este pintor y escultor italiano es el más importante de su país después de la Segunda Guerra Mundial. El coleccionista ha detallado como conoció su obra en el museo Guggenheim de Nueva York.
Por último, el director de la FAP ha expresado que este tipo de obras internacionales están permitiendo al Centro de Arte Contemporáneo conquense alcanzar más relevancia internacional. Carrascosa también ha explicado las semejanzas que hay entre el alma mater de la fundación, Antonio Pérez, y el coleccionista Roberto Polo, ya que ambos tienen conocimiento, pasión y generosidad para que el arte llegue a todo el mundo.