El vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, ha destacado que el nuevo Plan Hidrológico de la cuenca del Tajo, cuya aprobación está prevista para mañana, “abre una nueva era” ya que viene a acabar con la tendencia de llevar agua a otros territorios.
“Queremos que mañana salga adelante el Plan del Tajo porque supondrá un caudal importante para Castilla-La Mancha”, ha dicho el vicepresidente en la inauguración de un nuevo servicio de ITV (Inspección Técnica de Vehículos) en la localidad de Piedrabuena, en Ciudad Real.
Tal y como ha señalado Martínez Guijarro, el Plan Hidrológico del Tajo incrementa los caudales ecológicos del río a su paso por Aranjuez algo más de ocho metros cúbicos por segundo, lo que supondrá que el río Tajo “va a tener agua en cantidad y calidad suficiente para todo el curso medio del río. Eso significa que hay menos cantidad de agua disponible para trasvasar al Levante”.
Durante su intervención, Martínez Guijarro ha destacado que este nuevo Plan de cuenca es un paso “muy importante” para romper con el ‘statu quo’ que hasta ahora ha beneficiado a los regantes e instituciones del Levante. “No pueden pretender basar su desarrollo en un recurso que está a 300 kilómetros de distancia y que es escaso”, ha dicho toda vez que ha recordado que en la zona del Levante de España tienen las desaladoras como alternativa, “un recurso que no está a pleno rendimiento”.
En este sentido, José Luis Martínez Guijarro ha insistido en que la cuenca del Tajo necesita el agua para el río y para garantizar los abastecimientos en Castilla-La Mancha. “No podemos tener limitaciones al crecimiento y desarrollo industrial cuando se está llevando agua a otros territorios”, ha subrayado.