Cardenete se une al Abrazo al Agua mundial 2025, convocado por la asociación Alianza Mar Menor
Mila Herreros/ Cardenete
Alrededor de una treintena de personas celebraron el pasado sábado 9 de agosto, en Cardenete, el Abrazo al Agua 2025 junto a la fuente La Cornuda. Ya son cinco los años que la asociación AMARME (Alianza Mar Menor) convoca este evento reivindicativo, que en esta ocasión se ha llevado a cabo por primera vez en los cinco continentes y en los dos hemisferios. El lugar elegido este año en Cardenete tiene un carácter especial ya que, la fuente, La Cornuda, la cual se halla en el propio centro urbano, es uno de los puntos negros, donde habitualmente la contaminación difusa por nitratos (contaminación que no proviene de un punto específico, sino que se dispersa a través de grandes áreas, como la escorrentía agrícola o urbana) es más elevada, sobrepasando en varias ocasiones los 50 milígramos por litro. Las últimas mediciones hechas en mayo de este año por Ecologistas en Acción de La Manchuela dieron un valor de 55 mg/l. Sin embargo, no es la única fuente de la localidad que dio resultados elevados. Otros dos puntos, fuente El Piojo y lavadero la Pañuela recogieron en la misma fecha valores de contaminación por nitratos de 59 mg/l y 65 mg/l, respectivamente. Hay que tener en cuenta que el valor de referencia máxima para consumo humano está establecido en 20 milígramos por litro.
Origen del Abrazo al Agua
El Abrazo al Mar Menor es un acto simbólico que se celebra en las orillas de la laguna salada, impulsado por organizaciones de la región de Murcia, pero que, con el tiempo y desde hace tres años, ha ido sumando apoyos por toda España, y en muchos rincones de la geografía mundial bajo la denominación más genérica de Abrazo al Agua, incluyendo de este modo todos los ecosistemas acuáticos (fuentes, arroyos, lagos, lagunas, ríos, mares y océanos). Desde la organización se invitó a las asociaciones y particulares a unirse en una cadena humana “porque todas las aguas son la misma agua y todos los mares son el mismo mar”. “La protección del agua es un desafío universal” y el Abrazo al Agua “ha permitido solidarizarse con otras comunidades en defensa del agua en todo el mundo”.
AMARME ha contabilizado este año un total de 143 organizaciones y más de un centenar de cadenas humanas que han unido sus fuerzas para enviar un mensaje claro: defender el agua es defender la vida y el futuro del planeta. Abrazo al Agua, movilización reivindicativa El Abrazo al Agua es un evento pacífico, pero al mismo tiempo una firme reivindicación, exigiendo que se asuman responsabilidades y se adopten medidas urgentes para abordar las causas que están afectando gravemente a los ecosistemas acuáticos «en peligro por la contaminación humana: minas, agroindustria, ganadería intensiva, plásticos, químicos…», y porque, a pesar de las reiteradas protestas y advertencias «sigue prevaleciendo el uso del mar como sumidero de nuestros residuos, tanto sólidos como líquidos, como si su capacidad receptiva fuera infinita». Afirman que continuarán “luchando por la preservación de estos ecosistemas hasta que las administraciones tomen medidas efectivas para su protección”. Este año en el manifiesto común que se ha leído en todos los puntos donde se ha llevado a cabo el acto del Abrazo al Agua se ha incluido una llamada de atención a los conflictos bélicos, especialmente al genocidio que se está cometiendo en Palestina. Lo que está ocurriendo en Gaza también es un ecocidio a sus ecosistemas y a sus aguas.
El abrazo de 22 provincias españolas A nivel nacional, el Abrazo al Agua 2025 ha abarcado 22 provincias y siete comunidades autónomas: nueve convocatorias de Castilla La-Mancha (seis en la provincia de Cuenca, en torno a la Asociación Pueblos Vivos Cuenca); le siguen Castilla y León, con seis cadenas en Salamanca, tres en Segovia, en Burgos, Valladolid y León; Galicia, con cinco cadenas en las cuatro provincias, y los cuatro llamamientos en Andalucía; además de las que se llevaron a cabo en Castellón de la Plana, La Rioja y Cantabria. Cadenas humanas por todo el mundo Esta iniciativa, que nació para defender y tratar de garantizar la supervivencia del Mar Menor, se ha extendido de norte a sur (de Suecia a Egipto) y de este a oeste (de Japón a Hawái) por todos los rincones del planeta, con especial relevancia en Suecia.
Allí estaban convocadas once cadenas, diez en torno al lago Vättern aquejado de los mismos problemas que el resto de masas de agua. En este llamamiento sueco, los organizadores se habían propuesto rodear los 642 km de perímetro que tiene el lago, ya que «300.000 personas son las que utilizan el lago como fuente de agua potable», explican los convocantes, quienes producirán una película para mostrarla a los responsables políticos tras años reclamándoles que actúen. Entre las cadenas humanas de este año, una de las últimas en sumarse ha sido en Gaza, aunque sin fijar el sitio exacto donde se iba a celebrar por temor a los francotiradores. Sus problemas con el agua son muy graves. Otra cadena en Francia, en Les Mézerets en Normandía. Esta ola también ha llegado a defender el Nilo, en El Cairo. En el Pacífico se han celebrado cadenas en la Bahía de Tokio, en Honolulu y en la Bahía San Pablo de San Francisco. Y ha llegado a las aguas interiores en el desierto San Luis Potosí, México; en San Vicente, Colombia; y en Necochea, Argentina.
Vídeo. El abrazo al agua