El alcalde de El Picazo ha exigido al Gobierno de España el arreglo “urgente” de la entrada al municipio desde la concurrida carretera N-310. José Miguel Collado alerta de los socavones, “un auténtico peligro”, señala, de los arcenes inmediatos a la vía y cuyo deplorable estado “se va agravando con el tiempo”. El primer edil explica que no puede ni siquiera precisar “los años que hace que no se acomete una mejora en esta zona”. “Estos días de lluvia, por ejemplo, la situación ha sido especialmente complicada ya que se han formado balsas de agua que, aparte de ocultar los socavones, alcanzaban casi la carretera”, describe.
Hace meses, el alcalde pedía una reunión con la subdelegada del Gobierno en Cuenca, María Luz Fernández, solicitud que repetía en enero de este año. La representante de Pedro Sánchez en la provincia conquense no solo no le ha recibido sino que “ni siquiera se ha dignado a contestarnos”. José Miguel Collado lamenta la desatención y el abandono de las actuales instituciones gobernantes a los pueblos, “cuando los alcaldes nos dirigimos a ellos con alguna petición no es por molestarles, es para mejorar el bienestar de nuestros vecinos quienes, con sus impuestos, están pagando sus sueldos públicos”, señala. El alcalde de El Picazo defiende “el papel fundamental” de las infraestructuras y de los servicios básicos en el mundo rural, “son imprescindibles para evitar la despoblación”. Al hilo de las carencias que actualmente sufre la localidad, José Miguel Collado ha querido denunciar la supresión de la línea de autobús que comunicaba el pueblo con Valencia, “muy usada por la gente mayor. Ahora dependen de familiares o amigos o no pueden viajar”. “Esta es otra de las cuestiones que queríamos tratar con la subdelegada y que no nos da ocasión de trasladarle porque no me recibe”, apunta.
La misma suerte ha tenido el alcalde de El Picazo con la Diputación de Cuenca. Desde el inicio de la actual legislatura lleva esperando ser recibido por Martínez Chana. “Ni siquiera ha tenido el detalle con los vecinos del municipio de enviarnos un saluda para las fiestas del pueblo”, recuerda José Miguel Collado.
Una depuradora construida hace más de 20 años que no funciona, la necesidad de ampliar el cementerio municipal o el arreglo del salón municipal son otros de los problemas para cuya solución los vecinos de El Picazo siguen esperando la ayuda de las instituciones, “mucho hablar de la España Vaciada, pero a la hora de remediar todas estas carencias los gobernantes miran para otro lado y no escuchan ni a los vecinos ni a los alcaldes que les representamos”, finaliza José Miguel Collado.